Páginas vistas

martes, 12 de febrero de 2019

Hacer frente a los conflictos emocionales: tomar conciencia.

Para aprender a solucionar los conflictos emocionales, hay que comprender qué significado tiene este concepto. Ángel Ridao del Sol, actor y terapeuta Gestalt, nos ayuda a entenderlo.
“Un conflicto es la presencia contemporánea, en la misma persona, de dos motivaciones de carácter opuesto pero de gran intensidad. La emoción es un estado afectivo, una reacción subjetiva al ambiente acompañada de cambios tanto fisiológicos como endocrinos de origen innato, y que está influida por la experiencia personal y la función adaptativa que cada uno tenga en su vida. Son los estados internos, como el deseo o las necesidades del organismo. Las categorías básicas de las emociones son: miedo, sorpresa, aversión, ira, tristeza, alegría, tensión y desacuerdo, entre otras”.
El conflicto emocional más común que le suele surgir a una persona que recibe un diagnóstico de VIH es la no aceptación de la enfermedad; ¿por qué me sucede esto a mí? Una vez superada, o al menos aceptada, esta primera fase, pueden aflorar sentimientos de ira contra uno mismo y contra los demás, culpa, vergüenza, tristeza y, posteriormente, un amplio abanico de miedos: miedo al rechazo, a no ser aceptado por el entorno personal, a no encontrar una pareja, a infectar a otra persona, a no poder continuar con el ritmo de vida que llevábamos, a perder el trabajo, enfermar, morir, a no poder mantener la adhesión al tratamiento antirretroviral. Asimismo, puede surgir el estrés y la tensión ante los resultados médicos y la evolución de la enfermedad, e incluso también alegría mezclada con culpa al verte mejor que otros compañeros que también viven con VIH.
“Cuando rechazamos algún aspecto de nuestro ser nos dividimos, y es cuando entramos en conflicto con esa otra parte que también es nuestra. Este tipo de divisiones normalmente nos viene de nuestra infancia, por la cantidad de imperativos que recibimos del tipo: “eres un chico bueno o malo”, “esto se hace de esta forma”, “si no haces esto, no te vamos a querer”. Como adultos, además, hacemos nuestras otras sentencias que no nos pertenecen y que nos vienen dadas por los seres con los que nos relacionamos y por la misma sociedad en la que vivimos, y con todo ello entramos en un conflicto con lo que dicta nuestro corazón”, nos asegura Ángel.
Una vez que entendemos qué son los conflictos emocionales podemos dar el primer paso, que consiste en darse cuenta de lo que constituye nuestra realidad presente, cómo nos relacionamos, sentimos y reaccionamos ante los acontecimientos externos e internos; y también de las fantasías que creamos en nuestra mente, ampliando la conciencia de la responsabilidad de lo que uno es sin echar balones fuera y sin cargar con lo que es de otros y no nos pertenece.
En este primer proceso es importante comenzar a amarse en la totalidad, revisando y aportando luz a los aspectos en sombra que también nos pertenecen y que hay que integrar desde el amor y el consenso. Intentar estar en el presente; en el aquí-ahora es donde todo organismo tiende al equilibrio y a la sanación.
Ángel Ridao del Sol nos recomienda ampliar el tema con las siguientes lecturas:


    • Schnake, Adriana. La voz del síntoma. Editorial Cuatro Vientos; Enfermedad, síntoma y carácter. Editorial del Nuevo Extremo.
    Fuente: GTT-VIH.org

    SAL DE DUDAS.

    http ://www.saldedudas.info/index.php/es/   La APP Sal de Dudas, te ofrece juegos, videos e información sobre Vih y otras enfermedades de tr...